miércoles, 28 de noviembre de 2012

DÍA 15: Formado Para La Familia De Dios


DÍA 15: Formado Para La Familia De Dios

Dios es el que hizo todas las cosas, y todas las cosas son para su gloria. El quiso tener muchos hijos que compartieran su gloria. Hebreos 2:10a (NCV)

Miren cuánto nos ama nuestro Padre celestial, porque él nos permite ser llamados sus hijos, ¡y eso es lo que realmente somos! 1 Juan 3:1 (NLT)

Fue formado para la familia de Dios.
Dios quiere una familia, y lo creó a usted para que fuera parte de ella. Este es el segundo propósito de Dios para su vida, el cual El planeó antes que usted naciera. La Biblia entera es la historia de Dios formándose una familia que lo ame, que lo honre y que reine con El para siempre. La Biblia dice, "Su plan inmutable siempre ha sido el de adoptarnos a su propia familia, al traernos a él por medio de Jesucristo. Y esto le dio gran placer" (Efesios 1:5).
Porque Dios es amor, El valora las relaciones. Su propia naturaleza es relacional y El se identifica a sí mismo usando términos relacionados con la familia: Padre, Hijo y Espíritu. La Trinidad es la relación que Dios tiene consigo mismo. Es el modelo perfecto de la relación armoniosa y deberíamos de estudiar sus implicaciones.


La invitación a ser parte de la familia de Dios es universal (Marcos 8:34; Hechos 2:21; Romanos 10:13; 2 Pedro 3:9), pero hay una condición: la fe en Jesús. La Biblia dice, "Todos ustedes son hijos de Dios a través de la fe en Cristo Jesús" (Gálatas 3:26). Su familia espiritual es mucho más importante que su familia física por parentesco porque la primera durará para siempre. Nuestras familias en la tierra son dones maravillosos de Dios, pero son temporales y frágiles, a menudo divididas por el divorcio, la distancia, la vejez e inevitablemente por la muerte. Por otro lado, nuestra familia espiritual – nuestras relaciones con otros creyentes – continuará por toda la eternidad. Es una unión más fuerte y un vínculo más permanente que las relaciones por parentesco. Cuando Pablo se detenía a considerar el propósito eterno de Dios para todos nosotros juntos, espontáneamente expresaba su alabanza: "Cuando pienso en la sabiduría y el alcance de su plan, caigo de rodillas y oro al Padre de toda la gran familia de Dios – algunos de ellos ya en el cielo y algunos todavía aquí en la tierra" (Efesios 3:14-15).

Los Beneficios De Estar En La Familia De Dios

En el momento en que usted nació espiritualmente en la familia de Dios, se le dieron unos asombrosos regalos de nacimiento: el nombre de la familia, la semejanza de la familia, el privilegio de la familia, el acceso íntimo de la familia ¡y la herencia de la familia! (1 Juan 3:1; Romanos 8:29; Gálatas 4:6-7; Romanos 5:2; 1 Corintios 3:23; Efesios 3:12; 1 Pedro 1:3-5; Romanos 8:17). La Biblia dice, "Como eres su hijo, todo lo que él tiene te pertenece" (Gálatas 4:7b). 


El Bautismo: Identificándose Con La Familia De Dios

Las familias saludables sienten orgullo de ser familia; sus miembros no se avergüenzan de ser reconocidos como parte de la familia. Desdichadamente, he conocido a muchos creyentes que nunca se han identificado públicamente con su familia espiritual de la manera como Jesús lo ordenó – que fuesen bautizados. 
El bautismo no es un rito opcional, que puede ser demorado o postergado. Significa su inclusión en la familia de Dios. Al ser bautizado anuncia al mundo, "No me avergüenzo de ser parte de la familia de Dios." ¿Ha sido bautizado? Jesús ordenó este hermoso acto para todos los que están en Su familia. El nos dijo, "Vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo" (Mateo 28:19). Su bautismo es una imagen física de una verdad espiritual. Representa lo que pasó desde el momento en que Dios lo puso en Su familia: "Algunos de nosotros somos judíos, algunos somos esclavos y algunos somos libres. Pero todos nosotros hemos sido bautizados en el cuerpo de Cristo por un Espíritu, y todos nosotros hemos recibido el mismo Espíritu" (1 Corintios 12:13).



El Mayor Privilegio De La Vida

La Biblia dice, "Jesús y las personas que él hace santas, todas pertenecen a la misma familia. Por eso es que él no se avergüenza de llamarlas sus hermanos y hermanas" (Hebreos 2:11). Deje que esa maravillosa verdad penetre su mente. Usted es parte de la familia de Dios, y porque Jesús lo hace santo, ¡Dios está orgulloso de usted! Las palabras de Jesús son muy claras: "Jesús apuntó hacia sus discípulos y dijo, 'Estos son mi madre y mis hermanos. Cualquiera que hace la voluntad de mi Padre celestial ¡es mi hermano y mi hermana y mi madre!'" (Mateo 12:49-50). Ser incluido en la familia de Dios es el honor más alto y el mayor privilegio que jamás recibirá. No hay nada que le llegue ni por cerca. Cuando se sienta que no es importante, que no lo aman, o se sienta inseguro, recuerde a quién es que pertenece.


Un Punto Para Reflexionar: Fui formado para la familia de Dios.

Un Versículo Para Recordar: "Su plan inmutable siempre ha sido el de adoptarnos a su propia familia, al traernos a él por medio de Jesucristo." Efesios 1:5a (NLT)

Una Pregunta Para Considerar: ¿Cómo puedo empezar a tratar a otros creyentes como miembros de mi propia familia?




PROPÓSITO 2: USTED FUE FORMADO PARA LA FAMILIA DE DIOS


PROPÓSITO 2: USTED FUE FORMADO PARA LA FAMILIA DE DIOS


Yo soy la vid, y ustedes las ramas... Juan 155 (CEV)

Cristo nos hace un cuerpo... conectados unos a otros. Romanos 125 (GWT)



Muchas gracias a quienes me han acompañado hasta este momento, poco a poco nos vamos poniendo al día y también poco  a poco vamos llegando a la meta... Ya casi vamos en la mitad! 

Espero sus comentarios y sugerencias.

Un abrazo...

martes, 27 de noviembre de 2012

DÍA 14: Cuando Dios Parece Distante


DÍA 14: Cuando Dios Parece Distante

El Señor se ha ocultado de su pueblo, pero confío en él y pongo mi esperanza en él. Isaías 8:17 (TEV).


Dios es real, sienta lo que sienta.
Es fácil adorar a Dios cuando las cosas van de maravillas en nuestras vidas – cuando El ha proveído alimento, amigos, familia, salud y situaciones felices. Pero las circunstancias no son siempre placenteras. ¿Cómo hace para adorar a Dios cuando eso pasa? ¿Qué hace cuando Dios parece estar a un millón de millas de distancia? El nivel más profundo de adoración es alabar a Dios a pesar del dolor, darle gracias durante la prueba, confiar en El cuando es tentado, entregarse a El cuando está sufriendo y amarlo cuando parece distante.

Las amistades a menudo son probadas por la separación y el silencio; cuando están separadas por la distancia física o porque no se pueden hablar. En su amistad con Dios, no se sentirá siempre cercano a El. Phillip Yancey apuntó sabiamente, "Cualquier relación envuelve tiempos de intimidad y tiempos de distanciamiento y en una relación con Dios, no importa qué tan íntima sea, el péndulo se mueve de un lado a otro" Ahí es cuando la adoración se hace difícil. Para profundizar su amistad, Dios lo prueba con períodos de aparente separación – tiempos cuando se siente como que si El lo ha abandonado o se ha olvidado de usted. Se siente como que si Dios está a un millón de millas. San Juan de la Cruz se refirió a estos días de sequía espiritual, duda y separación de Dios como "la noche oscura del alma." Henri Nouwen los llamó "el ministerio de la ausencia." A.W. Tozer los llamó "el ministerio de la noche." Otros se refirieron a ellos como "el invierno del corazón".


Cuando Dios parece distante, puede que sienta que El está enojado con usted o que lo está disciplinando por algún pecado. De hecho, el pecado sí nos desconecta de la comunión íntima con Dios. Entristecemos al Espíritu Santo y apagamos nuestra comunión con El por medio de la desobediencia, del conflicto con otros, de estar muy ocupados, de la amistad con el mundo y otros pecados (Salmo 51; Efesios 4:29-30; 1 Tesalonicenses 5:19; Jeremías 2:32; 1 Corintios 8:12; Santiago 4:4). Pero muy a menudo este sentimiento de abandono o de separación de Dios no tiene nada que ver con el pecado. Es una prueba de fe – una que todos tenemos que enfrentar: ¿Va usted a continuar amando, confiando, obedeciendo y adorando a Dios, aún cuando no percibe Su presencia o tiene evidencia visible que está obrando en su vida?


¿Cómo alaba a Dios cuando no entiende lo que está pasando en su vida y Dios guarda silencio? ¿Cómo se mantiene conectado con Dios en una crisis, cuando no hay comunicación? ¿Cómo mantiene sus ojos en Jesús cuando están llenos de lágrimas? Haciendo lo que Job hizo: "Entonces él cayó al suelo en adoración y dijo: 'Desnudo vine del vientre de mi madre y desnudo partiré. El Señor dio y el Señor ha quitado; que el nombre del Señor sea alabado'" (Job 1:20-21). 

Dígale a Dios exactamente cómo se está sintiendo. Derrame su corazón ante Dios. Desahóguese de cada emoción que está sintiendo. Job hizo esto cuando dijo: "¡No puedo estar quieto! Estoy enojado y amargado. ¡Tengo que hablar! (Job 7:11). Cuando Dios parecía distante, él sollozó: "Oh, por los días cuando estaba en todo mi apogeo, cuando la amistad íntima de Dios bendecía mi casa" (Job 29:4). Dios puede manejar sus dudas, su enojo, su temor, su dolor, su confusión y sus preguntas.


Concéntrese en quién es Dios – en su naturaleza inmutable. Cualesquiera que sean sus circunstancias y a pesar de cómo se sienta, no deje de asirse del carácter inmutable de Dios. Recuérdese de lo que sabe que es eternamente verdadero acerca de Dios: El es bueno, El me ama, El está conmigo, El sabe por lo que estoy pasando, El se interesa en mí y tiene un buen plan para mi vida. V. Raymond Edman dijo, "Nunca dude en la oscuridad lo que Dios le dijo en la luz."

Cuando la vida de Job se derrumbó, y Dios guardaba silencio, aún así él encontró razones por las que podía alabar a Dios:

·  porque El es bueno y amoroso. (Job 10:12)
·  porque El es todopoderoso. (Job 42:2; 37:5,23)
·  porque El nota cada detalle de mi vida. (Job 23:10; 31:4)
·  porque El está en control. (Job 34:13)
·  porque El tiene un plan para mi vida. (Job 23:14)
·  porque El me salvará. (Job 19:25)

Confíe que Dios cumplirá sus promesas. Durante tiempos de sequía espiritual, tiene que depender pacientemente en las promesas de Dios, no en sus emociones, y darse cuenta que Dios lo está llevando a un nivel más profundo de madurez. Una amistad basada en emociones es obviamente una relación superficial. Por lo tanto, no se agite por los problemas. Las circunstancias no pueden cambiar el carácter de Dios. La gracia de Dios todavía sigue en todo su vigor; El sigue estando de su lado, aún cuando no lo sienta. En la ausencia de circunstancias positivas, Job se aferró de la Palabra de Dios. El dijo, "No me he apartado de los mandamientos de sus labios; he atesorado las palabras de su boca más que mi pan diario" (Job 13:15).


Recuerde lo que Dios ya hizo por usted. Si Dios nunca hiciera nada más por usted, aún así, El se merecería su alabanza continua por el resto de su vida debido a lo que Jesús hizo por usted en la cruz. ¡El Hijo de Dios murió por usted! Esta es la mayor razón para adorarle. Desdichadamente, nos olvidamos de los crueles detalles del agonizante sacrificio que Dios hizo por nosotros. La familiaridad genera la complacencia.


Un Punto Para Reflexionar: Dios es real, sienta lo que sienta.

Un Versículo Para Recordar: "Porque Dios ha dicho, 'Nunca te dejaré; nunca te abandonaré.'" Hebreos 13:5 (TEV)

Una Pregunta Para Considerar: ¿Cómo puedo mantenerme concentrado en la presencia de Dios, especialmente cuando lo siento distante?





DÍA 13: La Adoración Que Complace A Dios


DÍA 13: La Adoración Que Complace A Dios

Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con toda tu mente y con todas sus fuerzas. Marcos 12:30 (NIV)

Dios quiere todo su ser. Dios no quiere una parte de su vida. El pide todo su corazón, toda su alma, toda su mente y todas sus fuerzas. Dios no está interesado en un compromiso a medias, en una obediencia parcial o en las sobras de su tiempo y de su dinero. El desea su devoción total, no las migajas de su vida.

Una vez una mujer samaritana trató de debatir con Jesús cuál era el mejor tiempo, lugar y estilo de adoración. Jesús le respondió que esos detalles externos eran irrelevantes. Dónde adora no es tan importante como cómo adora y cuánto de usted mismo ofrece a Dios cuando adora. Hay una manera correcta y una manera incorrecta de adorar. La Biblia dice, "Seamos agradecidos y adoremos a Dios de la manera que le complacerá (Hebreos 12:28)". 

El tipo de adoración que complace a Dios tiene cuatro características:

Dios se complace cuando nuestra adoración es veraz. A menudo alguien dice, "Pienso que Dios es..." y después él o ella comparte su idea de la clase de Dios que le gustaría adorar. Pero no podemos arbitrariamente crearnos nuestra propia imagen conveniente o inofensiva de Dios y adorarla. Eso es idolatría. La adoración tiene que estar basada en la verdad de las Escrituras, no en nuestras opiniones de Dios. Jesús le dijo a la mujer samaritana, "Los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y verdad, porque ellos son el tipo de adoradores que el Padre busca (Juan 4:23)". "Adorar en verdad" significa adorar a Dios tal como El es verdaderamente revelado en la Biblia.


Dios se complace cuando nuestra adoración es auténtica. Cuando Jesús dijo que usted debe "adorar en espíritu", él no se estaba refiriendo al Espíritu Santo sino al espíritu suyo. Hecho a semejanza de Dios, usted es un espíritu que reside en un cuerpo y Dios diseñó su espíritu para comunicarse con El. La adoración es su espíritu respondiendo al Espíritu de Dios. Cuando Jesús dijo, "Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma" él quiso dar a entender que la adoración debe de ser genuina y de corazón. No es sólo una cuestión de decir las palabras correctas; tiene que sentir lo que dice. La alabanza que no viene del corazón ¡no es alabanza del todo! No tiene ningún valor y es un insulto a Dios.


Dios se complace cuando nuestra adoración es consciente. El mandamiento de Jesús de "Ama a Dios con toda tu mente" es repetido cuatro veces en el Nuevo Testamento. A Dios no le complace que cantemos cantos sin pensar, que oremos mecánicamente oraciones estereotipadas o que exclamemos indiscriminadamente "¡Gloria a Dios!", sólo porque no podemos pensar en otra cosa qué decir en ese momento. Si adora sin usar su mente, su adoración es hueca. Tiene que utilizar su mente. 
Jesús llamó la adoración que no usa la mente "repeticiones vanas" (Mateo 6:7). Incluso términos bíblicos pueden convertirse en gastadas expresiones estereotipadas debido al uso excesivo, y entonces dejamos de pensar en sus significados. Durante la adoración, nos resulta mucho más fácil ofrecer expresiones estereotipadas, que hacer el esfuerzo de honrar a Dios con palabras y maneras frescas. Por eso es que lo animo a que lea las Escrituras en diferentes traducciones y paráfrasis. Le ampliará sus expresiones de adoración.


Dios se complace cuando nuestra adoración es práctica. La Biblia dice, "Ofrezcan sus cuerpos como sacrificios vivos, santos y complacientes a Dios – este es el acto espiritual de adoración de ustedes" (Romanos 12:1).  ¿Por qué Dios quiere su cuerpo? ¿Por qué no dice, "Ofrezcan su espíritu"? Porque sin su cuerpo no puede hacer nada en este planeta. En la eternidad recibirá un cuerpo nuevo, mejorado y actualizado, pero mientras esté aquí en la tierra, Dios dice, "¡Dame lo que tienes!" El sólo está siendo práctico con respecto a la adoración. Tal vez ha oído a alguien decir, "No puedo ir esta noche a la reunión, pero estaré con ustedes en espíritu." ¿Sabe que significa eso? Nada. ¡No sirve de nada! Mientras esté en la tierra, su espíritu sólo puede estar donde esté su cuerpo. Si su cuerpo no está allí, tampoco usted está allí.
Cuando adoramos, hemos de "ofrecer nuestros cuerpos como sacrificios vivos." Ahora, usualmente asociamos el concepto de "sacrificio" con algo muerto, pero Dios quiere que usted sea un sacrificio vivo. ¡El quiere que viva para El! Sin embargo, el problema con un sacrificio vivo es que se puede bajar del altar, y eso es lo que hacemos muchas veces. El domingo cantamos "¡Adelante, Soldados Cristianos!", pero el lunes desertamos.


Matt Redman, un líder de adoración de Inglaterra, contó cómo su pastor le enseñó a su iglesia el verdadero significado de la adoración. Para demostrar que la adoración es más que música, él prohibió todo canto en sus reuniones por un tiempo mientras aprendían a adorar de otras maneras. Al cabo de ese tiempo, Matt había escrito la canción clásica "Heart of Worship" (Un Corazón de Adoración):


Te traeré más que una canción
porque la canción en sí no es lo que pides.
Buscas dentro de mí
más allá de las apariencias.
Estás viendo dentro de mi corazón. 
El corazón del asunto es un asunto del corazón.


Un Punto Para Reflexionar: Dios quiere todo mi ser.


Un Versículo Para Recordar: "Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con toda tu mente y con todas tus fuerzas" Marcos 12:30 (NIV)

Una Pregunta Para Considerar: ¿Que complace más a Dios en este momento -- mi adoración pública o mi adoración privada? ¿Qué voy a hacer acerca de esto?





DÍA 12: Desarrollando Su Amistad Con Dios


DÍA 12: Desarrollando Su Amistad Con Dios

El ofrece su amistad al íntegro. Proverbios 3:32 (NLT)
Acérquense a Dios, y Dios se acercará a ustedes. Santiago 4:8 (NLT)

Usted es el que escoge qué tan íntimo será con Dios.
Como cualquier otra amistad, tiene que esforzarse por desarrollar su amistad con Dios. No será por casualidad. Requiere deseo, tiempo y energía. Si quiere tener una conexión más íntima y profunda con Dios, tiene que aprender a compartir sinceramente sus sentimientos con El, confiar en El cuando El le pida que haga algo, aprender a interesarse en lo que le interesa, y desear Su amistad más que cualquiera cosa.

Tengo que escoger ser sincero con Dios. El primer ladrillo que tiene que poner para edificar una relación más profunda con Dios es la sinceridad completa – acerca de sus faltas y de sus sentimientos. Dios no espera que sea perfecto, pero sí insiste en su sinceridad total. Ninguno de los amigos de Dios en la Biblia era perfecto. Si la perfección fuese un requisito para tener amistad con Dios, nunca seríamos capaces de ser Sus amigos. Dichosamente, debido a la gracia de Dios, Jesús todavía es "el amigo de pecadores (Mateo 11:19)". 

En la Biblia, los amigos de Dios eran sinceros con sus sentimientos, muchas veces quejándose, dudando, acusando y arguyendo con su Creador. Dios, sin embargo, no parecía ponerse molesto por esta clase de franqueza. De hecho, El la alentaba.


¿Puede Dios tolerar esta clase de sinceridad franca e intensa con usted? ¡Absolutamente! La amistad genuina se edifica en la transparencia. Lo que puede parecer como osadía, Dios lo ve como autenticidad. Dios escucha las palabras apasionadas de sus amigos; El se aburre de las frases piadosas estereotipadas y predecibles. Para ser un amigo de Dios, tiene que ser sincero con Dios, compartiendo sus verdaderos sentimientos, no lo que piensa que debería de sentir o de decir.


Tengo que escoger obedecer a Dios en fe. Cada vez que confía en la sabiduría de Dios y hace lo que sea que le pide, aún cuando no lo entienda, profundiza su amistad con Dios. Normalmente no pensamos que la obediencia es una característica de la amistad; eso está reservado para los padres o el jefe o para un oficial superior, no para un amigo. Sin embargo, Jesús lo dijo claro que la obediencia es una condición para ser íntimo con Dios. El dijo, "Son mis amigos, si hacen lo que les mando (Juan 15:14)".


Tengo que escoger valorar lo que Dios valora. Esto es lo que los amigos hacen -- se interesan en lo que es importante para la otra persona. Cuanto más se haga amigo de Dios, más le interesarán las cosas que a El le interesan, se entristecerá de lo que le entristece y se regocijará en las cosas que le complacen.


Tengo que desear la amistad con Dios más que cualquier cosa. Los salmos están llenos de ejemplos de este deseo. David deseaba apasionadamente conocer a Dios por encima de cualquier cosa; él usó palabras como deseo, anhelo, sed, hambre. El tenía un deseo intenso de Dios. El dijo, "La cosa que más busco es el privilegio de meditar en su templo, vivir en su presencia todos los días de mi vida, deleitándome en sus perfecciones incomparables y en su gloria (Salmo 27:4)". En otro salmo dijo, "Para mí, tu amor significa más que la vida (Salmo 63:3)". 


No hay nada – absolutamente nada – más importante que desarrollar su amistad con Dios. Es una relación que durará para siempre. Pablo dijo a Timoteo, "Algunas de estas personas se han perdido de la cosa más importante de la vida – no conocen a Dios (1 Timoteo 6:21a)". ¿Se ha estado perdiendo de la cosa más importante de la vida? Puede hacer algo acerca de esto comenzando hoy. Recuerde, es su escogencia. Usted es el que escoge qué tan íntimo será con Dios.

Un Punto Para Reflexionar: Yo soy el que escoge qué tan íntimo seré con Dios.

Un Versículo Para Recordar: "Acérquense a Dios, y Dios se acercará a ustedes." Santiago 4:8a (NLT)

Una Pregunta Para Considerar: ¿Qué decisiones prácticas tomaré hoy para crecer en mi intimidad con Dios?





DÍA 11: Haciéndome Un Mejor Amigo de Dios


DÍA 11: Haciéndome Un Mejor Amigo De Dios


Ya que fuimos restaurados a la amistad con Dios por medio de la muerte de Cristo cuando todavía éramos sus enemigos, ciertamente seremos liberados del castigo eterno por medio de su vida. Romanos 5:10 (NLT).


Dios quiere ser su mejor amigo.
Su relación con Dios tiene muchos aspectos: Dios es su Creador y Hacedor, Señor y Amo, Juez, Redentor, Padre, Salvador y mucho más (Salmo 95:6; 136:3; Juan 13:13; Judas 1:4; 1 Juan 3:1 Isaías 33:22; 47:4; Salmo 89:26).  Pero la verdad más asombrosa es ésta: ¡el Dios Todopoderoso anhela ser su Amigo!


Fuimos hechos para vivir continuamente en la presencia de Dios, pero después de la Caída, esta relación ideal se perdió. Sólo unas cuantas personas en los tiempos del Antiguo Testamento tuvieron el privilegio de tener amistad con Dios. Moisés y Abraham fueron llamados "amigos de Dios," David fue llamado "un hombre conforme al corazón de Dios" y Job, Enoc y Noé tuvieron amistades íntimas con Dios (Exodo 33:11, 17; 2 Crónicas 20:7; Isaías 41:8; Santiago 2:23; Hechos 13:22; Génesis 6:8; 5:22; Job 29:4). Pero el temor de Dios, no la amistad, era más común en el Antiguo Testamento.
Pero después, Jesús cambió la situación. Cuando él pagó por nuestros pecados en la cruz, el velo en el templo, que simbolizaba nuestra separación de Dios, fue partido desde arriba hasta abajo, para indicar que el acceso directo a Dios estaba otra vez disponible.


La amistad con Dios es posible solamente debido a la gracia de Dios y al sacrificio de Jesús. "Todo esto es hecho por Dios, quien a través de Cristo nos cambió de enemigos a sus amigos" (2 Corintios 5:18a).

Un viejo himno dice, "Qué amigo que tenemos en Jesús," pero en realidad, Dios nos invita a disfrutar de la amistad y la comunión de las tres personas de la Trinidad: nuestro Padre (1 Juan 1:3), el Hijo (1 Corintios 1:9), y el Espíritu Santo (2 Corintios 14:14)

Haciéndose Un Mejor Amigo De Dios


A través de la conversación constante. Nunca tendrá una relación íntima con Dios si sólo asiste a la iglesia una vez por semana o incluso si tiene un tiempo devocional diario. La amistad con Dios crece cuando comparte todas las experiencias de su vida con El.

A través de la constante meditación. Una segunda manera de establecer una amistad con Dios es pensar en Su Palabra durante el día. Esto se llama meditación, y la Biblia repetidamente nos insta a que meditemos en quién es Dios, qué ha hecho y qué es lo que ha dicho (Salmo 23:4; 143:5; 145:5; Josué 1:8; Salmo 1:2).


Un Punto Para Reflexionar: Dios quiere ser mi mejor amigo.

Un Versículo Para Recordar: "La amistad con Dios está reservada para aquellos que le dan reverencia." Salmo 25:14a

Una Pregunta Para Considerar: ¿Qué puedo hacer para que me acuerde de pensar en Dios y hablarle más seguido durante el día?






sábado, 24 de noviembre de 2012

DÍA 10: El Corazón De La Adoración


DÍA 10: El Corazón De La Adoración


Entréguense a Dios... entreguen todo su ser a él para ser usados para sus rectos propósitos. Romanos 6:13 (TEV).


El corazón de la adoración es entregarse.
Entregarse no es una palabra muy popular; es tan desdeñada como la palabra sumisión. Implica perder, y nadie quiere ser un perdedor. Entregarse trae a la mente imágenes amargas de admitir la derrota en la batalla, de perder un juego o de darse por vencido a un oponente más fuerte. La palabra casi siempre es usada en un contexto negativo. Los criminales capturados se entregan a las autoridades. 

En una cultura competitiva como la nuestra, se nos enseña que nunca nos demos por vencidos y que nunca cedamos a nada – y, por lo tanto, no oímos mucho acerca de entregarse. Si ganar es todo, entonces entregarse es inconcebible. Preferimos hablar de ganar, de tener éxito, de vencer y de conquistar que de ceder, de sumisión, de obedecer y de entregarse. Pero entregarse a Dios es el corazón de la adoración. Es la respuesta natural al maravilloso amor y a la maravillosa misericordia de Dios. Nos entregamos a El, no por temor o por obligación, sino por amor, "porque él nos amó primero" (1 Juan 4:9-10,19).


La verdadera adoración - darle placer a Dios - ocurre cuando usted se da completamente a Dios. Note que en el versículo anterior el primer verbo y el último tienen la misma raíz: ofrenda.

La adoración consiste en ofrecerse a Dios.
Este acto de entrega personal es llamado muchas cosas: consagración, hacer a Jesús su Señor, tomar su cruz, morir a uno mismo, entregarse al Espíritu. No importa cómo lo llame, lo importante es que lo haga. Dios quiere su vida – la quiere en su totalidad. Noventa y cinco por ciento no es suficiente.

Existen tres barreras que impedirán que nos entreguemos totalmente a Dios: el temor, el orgullo y la confusión. Esto es porque no nos damos cuenta de cuánto Dios nos ama, queremos controlar nuestras vidas y mal interpretamos lo que significa entregarse.

¿Puedo confiar en Dios? La confianza es un ingrediente esencial de entregarse. No se entregará a Dios a menos que confíe en El, pero no puede confiar en El sino hasta que lo conozca mejor. El temor nos detiene de entregarnos pero el amor echa fuera el temor. Cuanto más comprenda cuánto Dios lo ama, más fácil se hace entregarse.


Admitiendo nuestras limitaciones. La segunda barrera que impide nuestra entrega total es nuestro orgullo. No queremos admitir que sólo somos criaturas y que no estamos en control de todo. Es la tentación más antigua: "Serás como Dios" (Génesis 3: 5). El deseo de estar en total control es la causa de la mayor parte de nuestro estrés. La vida es una lucha, pero lo que la mayoría de las personas no se dan cuenta es que, como Jacob, en realidad ¡estamos luchando contra Dios! Queremos ser Dios y de ninguna manera vamos a ganar esa pelea.


Lo que significa entregarse. Entregarse a Dios no es resignarse pasivamente, no es fatalismo, y no es una excusa para ser perezoso. Tampoco es aceptar el status quo. Puede significar exactamente lo opuesto: sacrificar su vida o sufrir para cambiar lo que necesita ser cambiado. A menudo Dios llama a los que se han entregado, a que hagan batalla por El. Entregarse no es para los cobardes o los inseguros. Tampoco significa dejar de pensar racionalmente. ¡Dios no va a desperdiciar la mente que le dio! Dios no quiere ser servido por robots.


La bendición de la entrega. La Biblia es muy clara sobre los beneficios que se reciben cuando entrega su vida totalmente a Dios. Primero, experimenta paz: "¡Deja de pelear con Dios! Si estás de acuerdo con él, tendrás por fin la paz y las cosas te irán bien" (Job 22:21). Después experimenta libertad: "Ofrézcanse a los caminos de Dios y la libertad nunca cesa... ¡[sus] mandamientos te liberan para vivir abiertamente en su libertad!" (Romanos 6: 17). Tercero, experimenta el poder de Dios en su vida. Tentaciones persistentes y problemas abrumadores pueden ser derrotados por Cristo cuando se los damos a El.


La mejor manera de vivir. Eventualmente, todos nos entregamos a algo o a alguien. Si no se entrega a Dios, se entregará a las opiniones o a las expectaciones de otros, al dinero, al resentimiento, al temor o a su orgullo, a pasiones o a su ego. Usted fue diseñado para adorar a Dios – y si falla en adorarle, se creará otras cosas (ídolos) a las que le dará su vida. Usted es libre de escoger a qué se va a entregar, pero no es libre de las consecuencias de esa escogencia. E. Stanley Jones dijo, "Si no se entrega a Cristo, se entrega al caos." 


Le advierto: cuando decide vivir una vida totalmente entregada, su decisión será probada. Algunas veces significará hacer tareas inconvenientes, impopulares, costosas o aparentemente imposibles. Muy a menudo significará lo opuesto de lo que tiene ganas de hacer. Uno de los grandes líderes del siglo veinte fue Bill Bright, el fundador de Campus Crusade for Christ (Cruzada Estudiantil para Cristo). A través de los miembros de Cruzada Estudiantil por todo el mundo, las Cuatro Leyes Espirituales y la película "Jesús" (que ha sido vista por más de cuatro billones de personas), más de 150 millones de personas han venido a Cristo y pasarán la eternidad en el cielo.

Una vez le pregunté a Bill, "¿Por qué Dios te usó y bendijo tanto tu vida?" El respondió, "Cuando era joven, hice un trato con Dios. Literalmente lo escribí y firmé mi nombre al final. Este decía, 'Desde hoy en adelante soy un esclavo de Jesucristo.'" ¿Ha firmado alguna vez un trato como ese con Dios? ¿O todavía está arguyendo y luchando con Dios por Su derecho de hacer con su vida como le plazca? Ahora es su tiempo de entregarse – a la gracia, al amor y la sabiduría de Dios.

Un Punto Para Reflexionar: El corazón de la adoración es la entrega.

Un Versículo Para Recordar: "Entreguen su ser entero a él para ser usados para sus rectos propósitos." Romanos 6:13b (CEV)

Una Pregunta Para Considerar: ¿Qué área de mi vida no le he querido dar a Dios?